Stopping and appreciating the details is something that sometimes goes unnoticed when we live a hectic day-to-day life.

When it gets late and I have not yet arrived home I like to stop and contemplate the beauty of the sunsets, the best thing about them is that they are never the same. Maybe they may have some resemblance in the colors but they are never exactly the same.

What is so special about this one? The sublime of its colors, that blue tone that is seen in gradient walking through the purple, pink, orange and that closes in the toasted yellow of the sun that is about to set.

The small spotlights on the poles of the super market offer a special touch of light to the whole scene and the intense green tree completes the scene.

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Detenerse y apreciar los detalles es algo que a veces pasa de vista cuando vivimos de maneja agitada día a día.

Cuando se hace tarde y aún no he llegado a casa me gusta detenerme y contemplar lo bonito de los atardeceres, lo mejor de ellos es que jamás son iguales. Quizás pueden tener algún parecido en los colores pero jamás es exactamente igual a otro.

¿Qué tiene este de especial? Lo sumible de sus colores, ese tono azul que se ve en degradé paseándose por el morado, rosado, naranja y que cierra en el amarillo tostado del sol que ya está por acultarse.

Los pequeños focos de los postes del súper mercado le ofrecen un toque de luz especial a todo el escenario y el árbol verde intenso, completa la escena.

¿Hay otro detalle que les llame la atención? Leo sus comentarios 🩷